Perú: Las cifras indicaban que estábamos por el camino correcto (4/4) / Carlos Basombrío Iglesias

«Nos tuvimos que ir un año antes, no porque hubiese mayores cuestionamientos a nuestra labor o alguna crisis en el sector o muertos por errores de manejo político, ni menos por algún escándalo de corrupción, sino por mi renuncia frente a problemas políticos por todos conocidos en el país.»

En las tres primeras entregas de este balance de nuestra lucha contra el delito urbano en el Perú, he presentado las estrategias que entendíamos eran las adecuadas para enfrentar el problema a distintos niveles y a las que apostamos para una estrategia de mediano y largo plazo.

Quiero ahora mostrar cifras que muestran que la situación tendía a mejorar. No conozco ninguna política pública que pueda más que eso en un periodo relativamente breve y ningún país que genere cambios inmediatos y drásticos. Y más bien el éxito se mide en función a tendencias positivas o negativas. VER MÁS…

 

Perú: La seguridad en el barrio (3/4) / Carlos Basombrío Iglesias

«Barrio Seguro es la estrategia más importante y ambiciosa de prevención de la inseguridad que creo, sin falsas modestias, se ha impulsado hasta ahora en América Latina».
Uno de los aspectos que más preocupa a la ciudadanía dentro de las múltiples tareas que tiene el Ministerio del Interior es cómo enfrentar la delincuencia urbana, que creció exponencialmente en los últimos 15 años.

Como dije en la primera entrega de esta especie de balance o rendición de cuentas, hay distintos niveles de criminalidad que se deben enfrentar con estrategias diferentes y específicas.

Expliqué primero cómo asumimos el enfrentamiento al crimen organizado en las ciudades; en la segunda entrega hablé sobre cómo habíamos concebido la lucha contra las bandas criminales, especialmente marcas y raqueteros, pero también el masivo fenómeno del robo callejero, expresado principalmente en el robo de celulares. VER MÁS…

 

Perú: 17 meses de lucha contra el delito (2/4) / Carlos Basombrío Iglesias

«Como en todos los países de América Latina y para el caso del mundo, en el Perú se repite la constante de que la gente se siente más segura en su barrio (incluso en los que no son tan tranquilos) que en la ciudad como conjunto.»

En la primera entrega di cuenta de los diferentes niveles de delito violento en el ámbito urbano y de cómo cada uno requiere un acercamiento específico. Describí cuál creo que es la estrategia adecuada para enfrentar las organizaciones criminales. Me ocupo, en esta segunda entrega, de lo que llamaría la ciudad violenta.

 

Como en todos los países de América Latina y para el caso del mundo, en el Perú se repite la constante de que la gente se siente más segura en su barrio (incluso en los que no son tan tranquilos) que en la ciudad como conjunto.

Ello tiene explicaciones múltiples, desde la percepción de que la ciudad es hostil e insegura, que se refuerza cotidianamente por los medios de comunicación donde vemos multiplicados los asesinatos, los robos violentos y cualquier otra situación que, cuando las comparamos con nuestro entorno inmediato (el barrio), tienden en la mayoría de los casos a ser más alarmantes y frente a los cuales nos sentimos menos preparados.

La segunda razón es que mucha de la criminalidad en las ciudades ocurre en los lugares de tránsito y encuentro. Para que haya arrebatos de celulares, tiene que haber paraderos muy congestionados o autos atrapados en medio del tráfico. Para que haya marcas tiene que haber bancos o casas de cambio. Para que haya discotecas y bares donde la violencia se exacerba, tiene que haber puntos de encuentro. O sea, la ciudad. Ese inmenso mundo anónimo donde todos desconfiamos de todos. Donde el diferente es casi sinónimo del peligroso. VER MÁS…

Perú: «17 meses después, podemos afirmar que hay una estrategia en marcha y con importantes resultados.» (1/4) / Carlos Basombrío

El explosivo incremento del crimen urbano violento en el siglo XXI tiene múltiples explicaciones y sobre ello volveré en otros artículos. Analizo ahora sus características.

Esencialmente son tres las formas y escenarios de crimen violento urbano que afectan a los ciudadanos y que requieren estrategias específicas para obtener resultados adecuados. A saber: crimen organizado, la violencia en la ciudad y la inseguridad en el barrio. Hay conexiones entre ellos, pero también especificidades que requieren análisis y atención específicos. VER MÁS…

Perú: ¿Es posible acabar con el crimen organizado? / Carlos Basombrío

Es importante iniciar con una distinción. En el Perú, hay dos expresiones muy diferentes del crimen organizado. La primera, la más antigua, es aquella que permite la histórica dificultad del Estado para controlar un territorio tan diverso y desafiante. Ello ha producido por muchas décadas contrabando, tala ilegal, trata de personas, minería ilegal, cultivos ilegales y, por encima de todas las anteriores por su perverso efecto, narcotráfico. (Dejo de lado a Sendero Luminoso, que si bien tiene un vínculo con lo anterior, tiene una especificidad propia que requiere un tratamiento particular).

La segunda manifestación del crimen organizado es mucho más reciente. Tiene poco más de una década y es un subproducto negativo del desarrollo económico de las últimas décadas y de los cambios en las lógicas de salida de la droga que, con mayor intensidad y frecuencia, transcurren por las ciudades y los puertos. Hablamos acá del crimen organizado en las ciudades.

Se trata de negocios criminales urbanos buscando beneficiarse de la nueva riqueza que se generó en los últimos lustros con el consiguiente boom de la construcción, mayor valor de terrenos por ciudades en expansión y una explosión de pequeños y medianos negocios. También influye el hecho de que el tráfico de drogas entra a ciudades y a puertos de salida del país y se imbrica con estos nuevos “negocios”. Apropiarse de parte o de toda la nueva riqueza emergente en las ciudades es su leit motiv. Sus armas principales son la extorsión y el sicariato. Su cobertura: el lavado de activos. VER MÁS…

El recreo se terminó hace rato! / Ricardo Valdés

El reto más urgente del próximo gabinete es, sin duda, la seguridad ciudadana. No hay tiempo que perder, ni espacio para las dubitaciones. Si algo convenció a buena parte de los electores a votar por PPK, fue el hecho de que mostraron un buen equipo de trabajo y una muy buena propuesta. Sorprende, en ese sentido, que el presidente electo no esté dando señales claras de tomar las riendas de la seguridad, pues ya podría estar “gobernando” antes de asumir el cargo.

El punto medular de la propuesta de seguridad es la refundación de la Policía Nacional “sacando a los malos elementos, entrenando al personal, mejorando sus remuneraciones, la infraestructura y la logística”; así como priorizar el trabajo desde las comisarías “para que puedan atender las demandas de seguridad de las familias”. Estos aspectos deben complementarse con la reforma del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM).VER MÁS…

 

Perú: Juan Mendoza: La inseguridad ciudadana

“Hay que mejorar sustantivamente las remuneraciones policiales que, a pesar de los aumentos, están a la zaga en la región”.

El Estado ha abandonado su función primordial de proteger al ciudadano. Vivimos atemorizados entre muros, rejas y alarmas. Regresar sano y salvo a casa es una aventura cotidiana. La tasa de victimización es una de las más altas de América. La seguridad privada se multiplica ante la indolencia del gobierno. ¿Qué hacer?

1. El enfoque debe ser integral. Para disuadir a los delincuentes hay que incrementar, simultáneamente, la probabilidad de ser capturado y sentenciado y la dureza de la reclusión. La acumulación de penas es una excelente idea, pero antes hay que evitar liberaciones escandalosas de delincuentes que echan por tierra el buen trabajo policial.
2. Hay que aumentar los recursos públicos. Chile, que tiene casi la mitad de la población, asigna 4 veces lo que el Perú a las cárceles.

3. Hay que cambiar la estructura del gasto. Como promedio, desde el 2000, apenas 10% del presupuesto del Interior se ha asignado a infraestructura y equipamiento. Por ello, la situación de las comisarias es calamitosa: un tercio no está conectada a la base de requisitorias, la mitad no tiene acceso a Reniec, y 40% no tiene agua, desagüe y luz de forma permanente. Y mejor ni hablar del equipamiento: nuestros policías tienen que pagar de sus bolsillos las balas que disparan. VER MÁS…

Perú: Propuestas de representantes de PPK y Fuerza Popular para lograr una Lima más segura / El Comercio

Representantes de PPK y Fuerza Popular expusieron las primeras medidas que implementarían para luchar contra la delincuencia
Propuestas de los candidatos para lograr una Lima más segura

Gino Costa, voceado ministro del Interior en un gobierno de PPK, propone incentivar la participación ciudadana en temas de seguridad.

En todos los distritos de Lima, casi sin distinción de edad, género u ocupación, el reclamo más airado hacia las autoridades obedece al avance de la delincuencia en las calles. Como ex ministro del Interior y actual asesor de Peruanos por el Kambio (PPK) en seguridad ciudadana, Gino Costa conoce de primera mano las necesidades y deficiencias del sistema, por lo que plantea las siguientes propuestas para la capital.

—La gestión municipal y el Ministerio del Interior parecen distanciados o poco prestos a coordinar acciones. ¿Cómo se mejoraría esta situación?
Trabajaremos de manera estrecha con el alcalde. Su rol es decisivo en el ámbito preventivo. Colaboraremos dándole todo el respaldo de la PNP, gratuito y durante las 24 horas, al serenazgo. Una medida importante será el nombramiento de una autoridad policial única en cada uno de los grandes distritos. Esta autoridad tendrá todos los recursos humanos y logísticos para organizar el patrullaje y la prevención de los delitos, según las necesidades específicas de cada distrito.

—¿Cuál es la posición de PPK sobre el uso de armas no letales entre serenos?
Creemos que su uso puede tener el efecto no deseado de incrementar la violencia, en lugar de reducirla. Vamos a exponer a los serenos, quienes no pasan por un proceso de selección ni de formación rigurosos. LEER MÁS…

Perú: ¿Peor trato a la Policía?, Imposible / Gustavo Carrión Zavala

 

Con asombro gigante, nos enteramos las primeras horas del nuevo año, las barbaridades que se cometían contra la institucionalidad en la Policía Nacional, al aprobarse tres ascensos al Grado de General, por, según los considerandos de las resoluciones, Acción Distinguida. Y en qué consistían estas supuestas excepcionales y meritorias acciones, las mismas que se cumplen diariamente y que no comportan ni la puesta en riesgo de sus vidas y mucho menos hechos trascendentes para la vida institucional. Una de las acciones distinguidísimas que, sustentan la promoción al grado de general, es la de haber logrado desalojar ambulantes de algunas cuadras de la Avenida Aviación. Nos hacemos cargo de la congoja de muchos policías, que por hechos de mayor riesgo han solicitado su promoción por acción distinguida y han recibido la negativa institucional para concedérselos. Pareciera que para el titular del Ejecutivo, la policía trabaja pesimamente, que cuando se logra una acción como desalojar ambulantes, es necesario premiar al Jefe tardío del operativo con su ascenso al máximo grado en la escala policial. VER MÁS…

Perú: «Refundar la policía»/ Gino Costa

Uno de los mayores desafíos organizativos es adecuar la estructura policial a la del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana

El objetivo más importante de la política de seguridad para el próximo gobierno será la refundación de la policía. No es posible un Perú seguro, próspero y moderno, en el que todos estemos sometidos al estado de derecho, sin una policía profesional y eficiente, a la que le confiemos nuestra protección y la aplicación de la ley. La experiencia internacional demuestra que esta es la única receta para vivir civilizadamente; no hay otra.

La refundación policial demandará un esfuerzo político, administrativo y presupuestal tal, que obliga a concentrar en ella toda la atención y la energía, en lugar de distraerse en medidas paliativas, onerosas, peligrosas y supuestamente temporales, como recurrir a los militares para labores de seguridad ciudadana o constituir una milicia de 50 mil licenciados de las Fuerzas Armadas. VER MÁS…

Perú: Tres provincias, en estado de emergencia por el narcotráfico

En el Callao, la policía puede ingresar a viviendas y realizar arrestos sin orden judicial. Medios locales revelan cada vez más evidencias de vínculos entre militares y empleados del gobierno regional involucrados en mafias

Mientras el presidente Ollanta Humala sostiene que las cifras de capturas e incautaciones de armas tras 25 días de estado de emergencia en el puerto del Callao son alentadoras, la prensa muestra más evidencias de policías, militares y empleados del gobierno provincial involucrados con el narco y mafias de extorsionadores, según explicó el diario español El País.

Desde el 5 de diciembre, en el Callao la policía puede ingresar a viviendas y realizar arrestos sin orden judicial. Las provincias de Santa y Casma, en la costa de la región Ancash, también fueron declaradas en emergencia el 24 de diciembre, por el mismo motivo.

La medida en el principal puerto peruano fue promulgada por el mandatario al día siguiente de que un sicario asesinara a Wilbur Castillo, un ex reo que en 2012 denunció que el gobernador y el alcalde del Callao tenían un centro de espionaje telefónico que implicaba a miembros de la organización política Chim Pum Callao. VER MÁS…

 

Perú: ‘Caracol’ usaba helicópteros militares del Vraem para trasladar droga hacia Lima

La Coca Nostra. Interceptaciones telefónicas a los miembros de la organización de narcotraficantes del capo chalaco también revelan la infiltración del aeropuerto Jorge Chávez y de los terminales portuarios del Callao para exportar cocaína.
Una de las razones por las que el juez Richard Concepción Carhuancho ordenó la captura internacional del capo del narcotráfico Gerson Gálvez Calle, «Caracol», fue porque el mafioso chalaco se ha convertido en el principal exportador de cocaína desde el Perú.

El fiscal que solicitó la búsqueda mundial de «Caracol», Víctor Luna Castillo, fundamentó el requerimiento ante el juez Richard Concepción basándose en escuchas telefónicas aplicadas a miembros de la organización criminal de Gerson Gálvez. En los diálogos interceptados por los agentes antidrogas que operan el sistema de escucha electrónica «Constelación», los narcotraficantes se refieren claramente a los traslados de cocaína del valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) hacia Lima mediante helicópteros militares que cumplen funciones en la zona de emergencia. VER  MÁS…

 

Perú: Distritos peligrosos gastaron menos del 60% para seguridad / Fernando Alayo Orbegozo

Callao asignó solo 2,61% de su presupuesto anual para combatir la delincuencia y SJL gastó apenas S/. 5 por vecino

La seguridad ciudadana es una responsabilidad compartida. Los municipios tienen una participación vital en la lucha contra la delincuencia. En cada uno de los distritos de Lima y Callao, la Policía Nacional ejecuta acciones previamente coordinadas con los gobiernos locales para la prevención del delito.

Aunque la realidad parece ser otra: las autoridades de los distritos con el mayor índice delictivo han ejecutado menos del 60% de su presupuesto para seguridad ciudadana en el 2015, según el último informe del Instituto de Defensa Legal (IDL).

San Juan de Lurigancho –el distrito con más delitos denunciados en comisarías entre enero y junio pasado, según el INEI– invirtió solo la mitad de su presupuesto para enfrentar la inseguridad. Esto significa que su comuna ha gastado S/.5 anuales por vecino en el rubro. VER MÁS…

Perú: CCL: El 94% de empresas cree que actos delictivos se incrementaron considerablemente

La Cámara de Comercio de Lima (CCL) presentó los resultados de su estudio denominado “Percepción de Seguridad Ciudadana”, el cual permitió conocer que el 94% de los empresarios a nivel nacional consideran que los actos delictivos se han incrementado considerablemente.

Mientras que el 3% ha percibido que los actos delictivos se incrementaron levemente y el 1% piensa que no ha disminuido ni ha aumentado. Solo el 2% piensa que los actos delictivos han disminuido levemente. VER MÁS…

Perú: Estancados en seguridad / Gino Costa

Según el foro, nuestro desempeño en seguridad ciudadana llegó a su punto más bajo en el 2013.

Hace unas semanas el Foro Económico Mundial publicó su informe sobre competitividad, que muestra cómo está nuestra capacidad de generar riqueza y prosperidad en perspectiva comparada, pues participaron en la evaluación 140 países.

Lamentablemente, después de una mejora significativa durante la última década, en que llegamos a ubicarnos en el puesto 61 en el2012 y en el 2013, los dos últimos años hemos retrocedido a los puestos 65 y 69, respectivamente. Estos son los peores resultados entre los países de la Alianza del Pacífico, pues Colombia mejoró 5 puestos, pasando del 66 al 61; y México, 4, del 61 al 57. Chile, por su parte, retrocedió solo 2 puestos, del 33 al 35. VER MÁS…

Perú: Nunca con tanto dinero se gastó tan poco / Carlos Basombrío

Estamos enredados en un falso debate sobre si las Fuerzas Armadas podrían ser la solución a la delincuencia. La mayoría de la población está desesperada y fantasea con miles de soldados que impedirán los robos, las extorsiones, el sicariato, etc.

Ya varios políticos se han sumado al carro populista de que esa es la solución. No les importa mentir y generar una nueva frustración. La razón es simple: no hay esos miles de militares sobrantes. Los cuarteles no logran llenarse para las funciones primordiales y, por tanto, salvo emergencias temporales y focalizadas, no hay esos soldados extras. VER MÁS…

Perú: Frente al crimen, el derecho / Editorial El Comercio

Ante las amenazas de la delincuencia es clave responder enérgicamente, pero siempre dentro de la ley.

El ministro del Interior ha planteado calificar de terrorismo el uso de granadas por extorsionadores. Ha reconocido, de antemano, que se debe hacer un análisis jurídico de la propuesta.

No está mal hacer propuestas y discutirlas. Aunque varios ministros del mismo Gabinete tengan posiciones distintas, siempre será bueno discutir sobre medidas para combatir la delincuencia. Lo importante es resolver y actuar de manera rápida, eficaz y eficiente. Para el ministro Pérez Guadalupe “el uso de granadas por parte de delincuentes para atemorizar a las víctimas permite la calificación de terrorismo”. No es necesario, agrega, que se trate de una “organización criminal ideologizada”. VER MÁS…

Perú: Juan José Garrido: Fuera de las manos Editorial Perú21

El lunes, la delincuencia dio otro salto cualitativo. Falleció el oficial Adolfo Leonidas Castellano, agente de la UDEX, desactivando un explosivo. Y no intentaba desactivarlo en el Vraem. La granada era una de las dos dejadas por extorsionadores a las afueras –lea bien– de un colegio en Villa El Salvador.

No fue, lamentablemente, un caso aislado: cuatro personas más murieron a manos de sicarios, dos en un restaurante en San Martín de Porres, otro en una cabina en Villa María del Triunfo y otro en el Callao. Y ayer, en La Libertad, otros extorsionadores dispararon contra un colegio, adelantando un trágico final.

Los peruanos sabemos sobrevivir al caos económico y a las trabas burocráticas, a la corrupción generalizada y a la indolencia de la clase política. Pero regresar a niveles de criminalidad e inseguridad como estos sobrepasa nuestra peor pesadilla. VER MÁS…

Perú: Chapa tu choro: Poder Judicial condena castigo a delincuentes

Víctor Ticona, presidente del PJ, instó a la población a no tomar la justicia en sus propias manos.

El presidente del Poder Judicial, Víctor Ticona Postigo, solicitó calma a la población para que no tome la justicia por sus manos, en relación a diversas campañas como la denominada «chapa tu choro», en las que se promueve que sea la ciudadanía quien capture y agreda a delincuentes como escarmiento en respuesta a lainseguridad ciudadana. VER MÁS…

Perú: ¿chapa tu choro? / Gustavo Carrión Zavala

Estamos asistiendo a un alarmante estado de crispación popular, frente a la inseguridad , la violencia empleada por los criminales y a la falta de respuesta eficaz de las agencias que tienen que ver con la persecución del crimen, que ha promovido peligrosas iniciativas de justicia popular, acercándonos a la barbarie en términos de institucionalidad y civilización.
Entendemos que la población esté crispada y cansada de ser un número en las estadísticas de victimización, cansada de tener que reducirse a espacios menores para no exponerse al peligro, cansada de resignar su vida ciudadana en una democracia que cada vez se aleja mas de ser tal, habida cuenta que no pueden ejercer sus derechos y libertades, cansada de los discursos que dan cuenta de una inexistente política de seguridad ciudadana, cansada del juego del “gran bonetón”, por el cuál las agencias que deben mantener la indemnidad de las personas, se acusan recíprocamente de las fallas del sistema. VER MÁS…

Perú: Los primeros decretos legislativos / Gino Costa

El 27 de julio el gobierno publicó los tres primeros decretos en el marco de las facultades delegadas en seguridad ciudadana

El 27 de julio pasado, el gobierno publicó los tres primeros decretos legislativos en el marco de las facultades delegadas en seguridad ciudadana. El primero crea un mecanismo de recompensas a quienes provean información que lleve a la captura de miembros de organizaciones criminales. El segundo tipifica el delito de sicariato. El tercero establece un procedimiento expeditivo para ubicar los equipos de telecomunicación utilizados para cometer delitos, la llamada geolocalización.

Las recompensas no son nuevas en el país. Existen en la lucha contra el terrorismo desde la primera administración de García. Y contra la evasión tributaria desde 1996. VER MÁS…

Perú: «Cambiar la agenda» / Gino Costa

El alcalde metropolitano ha propuesto que los serenos porten armas no letales. ¿Constituyen la solución?

 

El desborde de la inseguridad obligó la semana pasada a muchos alcaldes de Lima a salir a la palestra y proponer medidas para enfrentarla. Algunos han pedido al Gobierno que declare el estado de emergencia en sus distritos y despliegue a los militares para vigilar y patrullar las calles. El alcalde metropolitano ha propuesto que los serenos porten armas no letales. ¿Constituyen la solución? Ciertamente, no; pues no hay una sola medida que, por sí misma, resuelva los complejos problemas de criminalidad que enfrentamos. VER MÁS…

Perú: ¿Quiénes son delincuentes en el Perú y por qué? Factores de riesgo social y delito en perspectiva comparada en América Latina / Gino Costa y Carlos Romero.

g2Este informe –copublicado por el PNUD y Ciudad Nuestra, con el apoyo de la Defensoría del Pueblo, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID)– pretende contribuir a explicar el delito en el país. Este ha experimentado un incremento importante precisamente durante los años en que la economía peruana crecía sin precedentes y las condiciones sociales mejoraban significativamente. Algo similar ha ocurrido en toda América Latina. Es lo que el
PNUD ha definido como la paradoja latinoamericana, que podría resumirse en crecimiento económico, mejora social y aumento de la violencia y el delito. VER MÁS…

Perú: Lima: ¿cómo hacerla más segura? / Gino Costa | Carlos Romero

Ciudad Nuestra se complace en presentar esta nueva publicación, la décimo tercera desde su creación en el 2007, sobre la situación de la inseguridad, la violencia y el delito en Lima Metropolitana. La oportunidad de este trabajo g1es obvia, por cuanto los problemas de seguridad constituyen la principal preocupación ciudadana en la capital y, como lo demuestran los debates públicos de las últimas semanas, sigue sin existir claridad sobre cómo abordarlos con eficacia, de manera integral y desde una perspectiva democrática. VER MÁS…

Perú: Los costos de la delincuencia / Juan José Garrido

Cuando un emprendedor decide iniciar un negocio, por grande o chico que sea, usualmente traza un bosquejo de lo que serán los ingresos y costes, a fin de calcular los márgenes (y eventual futuro) del mismo. En su análisis incluirá los costos de materiales, servicios de terceros, personal, gastos administrativos y financieros, impuestos, y así. Eventualmente, si el emprendedor (potencial empresario) decide cubrirse ante potenciales contingencias, integrará una línea de “otros gastos”, donde recaerán todos aquellos expendios no imaginados al trazar el plan de negocios.

En la larga lista de eventos imprevistos se incluirán, sin dudas, los gastos incurridos por coimas, robos, extorsiones y otras formas de delincuencia y crimen organizado. En un país desarrollado, esos costes serán cercanos a cero. Pero en nuestro país, y con la actual ola de violencia e inseguridad (y regulaciones, ya que andamos en esas), esos costos no solo existen, sino que escalan cada día. ¿Cuánto suman? Pues lo suficiente para convertir ciertos negocios –rentables en el papel– en inviables. VER MÁS…

 

Perú: Hoy mal, mañana peor / Fernando Rospigliosi

Análisis del discurso presidencial respecto a seguridad ciudadana.

No parece casualidad que el presidente Ollanta Humala relegara para el final de su discurso de Fiestas Patrias el tema que más preocupa a la mayoría de la población, la seguridad ciudadana. Su gobierno ha fracasado clamorosamente durante cuatro años en reducir la delincuencia y, después de escuchar lo que dijo ayer, quedan pocas dudas de que dentro de un año estaremos peor que hoy. Por eso, probablemente colocó en la última parte este espinoso tema, quizá con la esperanza de que muy pocos lo escuchen. VER MÁS…

Perú: Lima: ¿cómo hacerla más segura? / Gino Costa

Para fortalecer la vigilancia y el patrullaje es necesario involucrar en un solo plan, los recursos de la PNP y municipios

La última publicación de Ciudad Nuestra, que lleva como título la pregunta que el título de esta columna formula, propone en más de 30 páginas una hoja de ruta, con recomendaciones de política pública. Lo central de la propuesta es que la respuesta a la inseguridad se construye de abajo hacia arriba, en el escenario local donde viven los ciudadanos, cuya protección frente a la delincuencia es la principal razón de ser de la política de seguridad ciudadana.

La jurisdicción local más próxima al ciudadano es el distrito, desde donde es preciso reconstruir la capacidad estatal tanto de prevenir el delito a través de la vigilancia y el patrullaje, como de perseguirlo a través de la investigación criminal. VER MÁS…

 

Perú: Seguridad: poco y tarde / Carlos Basombrío

En su último mensaje, Humala ha desperdiciado la oportunidad de hacer una convocatoria de Estado para lanzar el conjunto de reformas institucionales que se necesitan frente al desborde de la inseguridad ciudadana, convertido en el principal problema del país. Es verdad que, a estas alturas, la posibilidad de que el gobierno lidere una convocatoria de esta naturaleza es mínima. Ya ha perdido cuatro años y van siete ministros del Interior y no hay una política de Estado que los respalde; han tenido iniciativas muchas veces incoherentes, y hasta contradictorias, cuyos resultados están a la vista. VER MÁS…

 

 

Perú: La magnitud de nuestra desolación / Carlos Basombrío

Usando como base datos de encuesta del INEI* el último año se han cometido 7´967,846 delitos, más de 650,000 al mes, más de 21,000 diarios, más de 900 cada hora cada hora, 15 cada minuto. Los más frecuentes son el robo de dinero, celular o cartera. Entre exitosos (la gran mayoría) y fallidos tenemos 6´055,563 por año, más de 11 por minuto. Lo de las estafas me sorprende, pero en un año habrían habido 1´593,569, más de 4,000 al día.

Ojo y además está el crimen organizado, en particular la extorsión a negocios en los barrios, el sicariato y el narcotráfico. No extrañe pues, que en la misma encuesta, el 85,6%, es decir casi 15 millones de personas, piensen que pueden ser víctimas de un delito en el año que viene. VER MÁS…

Perú: «Lima, ciudad desguarnecida» / Gino Costa

Lima es junto con La Paz, la capital sudamericana más desguarnecida. Siete de cada 10 limeños viven sin vigilancia policial

La inseguridad es el principal problema de Lima, que presenta la sexta victimización por delincuencia más alta entre las capitales del continente y la tercera entre las sudamericanas, después de Quito y La Paz. La extensión del fenómeno delictivo explica la escasa confianza en la policía, una de las más bajas en la región. Alta victimización y baja confianza determinan los elevadísimos niveles de temor.

A pesar de lo anterior, Lima no es una ciudad especialmente violenta. Entre los años 2011 y 2013, su tasa de homicidios fue de solo 4,8 por 100 mil habitantes, que se ubica debajo del promedio nacional y es una de las más bajas entre las capitales del continente. Hay señales, sin embargo, de que la violencia viene creciendo como consecuencia del sicariato y las extorsiones, y del mayor uso de armas de fuego en la comisión de los delitos, que pasó del 5,7% en el 2011 al 7,6% en el 2013. VER MÁS…